La Palm House o Casa de las palmeras en kew Gardens

Ir a visitar los jardines de Kew, para mi, ha sido una experiencia increíble. Está claro que soy una friki de las plantas y que me voy a detener a ver cada especie rara que vea, pero incluso para el menos entendido, este lugar es tan bonito y está tan bien cuidado que le va a dejar boquiabierto. 

Lo primero que hice al entrar en este jardín botánico fue visitar la Palm House, que está junto a la entrada conocida como Victoria Gate.

Palm House, invernadero de estilo victoriano

Frente al invernadero o Palm House hay un lago de aguas turquesa surcado por cisnes:

Pero como comprenderéis si soléis leer mi blog, yo estaba loca por entrar en el invernadero repleto de plantas tropicales, un pequeño paraíso de hojas verdes y grandes... bueno, pequeño, lo que se dice pequeño, no es:

Cuando uno entra dentro, abriendo una enorme puerta de cristal y hierro, en seguida siente una bofetada en la cara de aire húmedo y caliente que hace que estas plantas estén en su salsa:

Este invernadero presenta una organización de las plantas en función de su origen geográfico, por lo que podemos encontrar la zona de Las Américas, la de África y la de Australasia.

Grandes plataneras

Más plataneras

Heliconias

Detalle de la flor

Hay que tener cuidado si uno se encuentra con esto por el campo, apoyarse no debe ser muy agradable:

Aiphanes eggersii (Ecuador)

En la foto no se aprecia bien, pero me impresionó el tamaño de los brotes nuevos del bambú gigante (Gigantochloa verticillata):

Había una regla enorme en la que indicaban lo que crecía cada día. Incluso 20 cm de crecimiento en un sólo día...

El techo que ofrecen las hojas de las cecropias es precioso:

Estas coloridas flores son de un híbrido de jardinería: Pavonia x gledhillii:

Más flores:

Papaya (Carica papaya), una planta de hojas muy interesantes, aparte de su fruto:

Unas escaleras de caracol te invitan a subir para disfrutar de las copas de las palmeras y las cecropias:

La vista es espectacular y el óxido de la estructura evoca un edificio abandonado y colonizado por la vegetación:

Las hojas de las plantas son tremendas:

Una vista de la estupenda escalera:

Hojas de Cecropia:

Esto es lo que se encuentra uno arriba:

Pero si bajas las escaleras hasta la planta de abajo resulta que puedes seguir bajando... ¡¡lo que te encuentras en un acuario con peces y medusas!!

Casi podrían confundirse con plantas:

Peces con pulmones:

Las flores y frutos que salen del tronco son una característica habitual de las zonas tropicales:

Pleiocarpa mutica

Este invernadero es taaaan grande... y taaaan bonito... y está taaan lleno de plantas preciosas:

Flores de África (Scadoxus cinnabarinus):

Ahora os presento a la famosa cícada (Encephalartos altensteinii) de Kew Gardens ya que es la planta en maceta más antigua del jardín, con alrededor de 200 años. Llegó a estos jardines en el año 1775, por lo que ha vivido durante la Revolución Francesa (1789), el debut de la novena sinfonía de Beethoven, la abolición de la esclavitud, la hambruna en Irlanda por culpa de la patata (1845), la publicación de "El Origen de las Especies" de Darwin (1859), el nacimiento de Gandhi (1869), síntesis de la aspirina (1899), Amundsen llega al Polo Sur (1911), la Primera Guerra Mundial, etc...

Es tan grande que tienen que sujetarla:

Otra cícada, más pequeña pero muy chula (Encephalartos horridus). Eso sí, si te encuentras eso por el campo más vale que no te acerques...no me imagino lo que puede llegar a pinchar:

Clivias:

Clivia gardenii:

¡¡Un Amorphophallus konjac!! con lo que me gustan:

Crinum asiaticum var. pedunculatum:

Artocarpus heterophyllus (jackfruit, jaca, yaca, panapén):

Esta a lo mejor os suena porque la venden como planta de interior en algunas tiendas (Medinilla magnifica):

Otra ornamental típica de interiores, pero variegada (Spathiphyllum spp):

Pandanus spp:

Me encantan las Colocasia spp.:

Y esto...no encontré el nombre pero me maravillaron las florecillas verdes y blancas:

En estas fotos no se aprecia la magnitud del invernadero y de las plantas que alberga. Realmente es espectacular. Si alguna vez vais a Londres, no os lo perdáis, se llega en metro perfectamente y merece la pena verlo.