Hoy os muestro el último jardín visitado durante el Garden Bloggers Fling de 2014, en Portland, Oregón, Estados Unidos. Ha sido un largo, pero bonito, camino por medio de posts de cada uno de los jardines, que me ha ayudado a recordar la belleza que pude observar y que queda refugiada en la mente de manera difusa, casi más presente en forma de sensaciones que en imágenes. Lo que uno vio se va desdibujando y las imágenes se hacen cada vez más borrosas...sin embargo, las sensaciones no sólo se conservan, sino que se van haciendo cada vez más fuertes y más bellas.
Es por eso que al repasar las fotos y poner de nuevo imagen a los recuerdos, se vuelve a un mundo mágico, que es el que intento transmitir al mostrarlas en el blog.
Este último jardín, Bella Madrona, no es el más impactante a primera vista, ni el que tiene las plantas más raras o el más florido. Sin embargo es simplemente perfecto y el que me ha dejado la huella más profunda en el recuerdo. Es magistral, inimaginable, mágico. Jamás se me pasó por la cabeza que pudiera existir un lugar así. Tendría cabida en un cuento de hadas, uno de la edad media y hasta en una historia de miedo. Posee una inacabable capacidad de sorprender.
Aquí tenéis, en todo su esplendor: Bella Madrona