En estas fechas, que deberían ser de frío donde yo vivo, suelo disfrutar con mi familia de la tranquilidad del pequeño pueblo en el que nació mi padre, y al que siempre he llamado "mi pueblo". Sí, sí, es Carrascosa, en la Serranía de Cuenca.
El año pasado por estas fechas estuve allí con mi madre, siendo quizás la última vez que salí al campo solo con ella. Ahora lo recuerdo y fue una salida muy especial, en la que disfrutamos de un antiguo molino en ruinas y de la soledad de la Herrería de Santa Cristina en invierno (la aldea de Carrascosa). Hacía mucho más frío que este atípico diciembre, y mi madre tuvo la paciencia que siempre tenía para esperarme mientras yo practicaba la fotografía nocturna. Pasó un poco de frío la pobre.
Aquella noche de 27 de diciembre del 2014 la niebla lo envolvió todo, dando lugar a una atmósfera propia de la leyenda de Sleepy Hollow (el jinete sin cabeza). Así de misterioso se veía mi pueblo envuelto en ella:
Llevo un par de años practicando de vez en cuando las fotos nocturnas, que me apasionan y que quiero ir mejorando poco a poco. Por ello me parece buena idea compartirlas para finalizar este 2015.
Aquel día con mi querida madre había una atmósfera especial en la aldea de la Herrería:
Como siempre, destacaban sus puertas que ¡cuántas cosas habrán visto desde 1875!
El arroyo que discurre junto a la calle (y que este año a principios de diciembre estaba seco, tristemente):
O las semillas de una clemátide o hierba de los pordioseros (Clematis vitalba), brillando con una luz especial gracias a la iluminación a contra luz de una farola:
Por cierto, se conoce como hierba de los pordioseros porque los mendigos la usaban para producirse llagas (ya que irrita la piel) y dar más pena cuando pedían.
Estuve 15 o 20 minutos intentando sacar una foto nocturna de esta paridera mientras mi madre me acompañaba. Sin embargo había nubes y no conseguí nada muy atractivo.
Al acercarnos al pueblo no me resistí a esta imagen. Efectivamente, en la primera foto del post el color no es el real ya que cambié el balance de blancos de la cámara para experimentar. Pero me gustó el resultado.
Una vez dentro de Carrascosa, con mucho frío, quise retratar uno de los portales más especiales del pueblo, con este arco, en el que nació mi padre hace ya bastantes años, cuando los pueblos aún tenían vida.
La luna y varias farolas intentan hacerse ver a través de una densa niebla:
Aquí la luna también ilumina la fría noche, esta vez con nieve:
Pero en el hemisferio norte, el invierno es cuando menos destaca la Vía Láctea en el cielo. Es por eso (y por el frío que paso por la noche, no os voy a engañar...soy perezosa para eso) que la mayoría de mis fotos nocturnas son de verano o de otoño.
Estas fotos son del Vigía de la Hoz Somera, en Carrascosa. Las tomé con mi primo Ben este otoño:
Estamos en medio de una ciudad encantada (formación típica de zonas kársticas):
Y de noche uno se puede encontrar de todo...
Otras veces el árbol protagonista es un pino negral o laricio (Pinus nigra):
Es una maravilla disfrutar de un cielo estrellado sin contaminación lumínica. Quizás una de las experiencias más bonitas en la naturaleza y más cercanas a lo que sentían nuestros antepasados, antes de la invención de la luz eléctrica:
Y esta es la entrada a mi pueblo:
Las vistas del cielo desde mi casa en verano son estas. Me encantan y espero poder disfrutarlas algún día desde un jardín bonito y bien ejecutado, sin cabras que se lo coman todo:
Por último os quiero mostrar una de las principales protagonistas de mis fotos nocturnas: la seta. Es un tormo de piedra caliza que se presta para hacer fotos interesantes. Espero que os gusten.
Muchas de estas fotos no serían posibles sin la paciencia de los que me acompañan al campo de noche (cuando voy sola paso mucho miedo) y que muchas veces me ayudan con la iluminación de los objetos a fotografiar o con el encuadre a escoger para la imagen. Gracias a mi novio Omar, a mi padre y a mi madre, que ya no podrá acompañarme más (y espero que no lo haga, porque me daría un susto de muerte). Ojalá no os canséis y sigáis acompañándome :).
Preciosas fotos si señora, desearte también Felices fiestas para ti y tus seres queridos.
ResponderEliminarMuchas gracias Mario :). ¡¡Espero que hayas tenido unos días estupendos!!
EliminarSon preciosas Lisa, me encantan. Yo también te deseo un Feliz 2016. Muchos besos.
ResponderEliminarMuchas gracias Teresa :D. ¡¡¡Muchos besos!!
EliminarLa seta, las estrellas, la paciencia de tus acompañantes, todo fantástico; y tus fotos... realmente espectaculares. Te felicito y aprovecho para desearte un año que te ayude a olvidar malos momentos, que te ilusione y veas el futuro con optimismo. ¡Feliz año! y muchos besos, Lisa :-)
ResponderEliminarMuchas gracias María José... desde luego que tienen paciencia...me sorprenden, jejeje. Muchas gracias por tus deseos...espero encontrar grandes ilusiones este año como tú dices. ¡Feliz año y muchos besos!! :D
EliminarFantásticas fotos Lisa. No te canses de hacer artículos como este. Qué tu y los tuyos tengáis el mejor 2016,
ResponderEliminarMuchas gracias José María :). La Serranía es una constante fuente de inspiración para todos nosotros :). Este fin de semana estaba preciosa con niebla y lluvia. Espero que también tengas un gran 2016.
EliminarMaravillosas fotos, Lisa! Te deseo un año muy feliz. Un abrazo!
ResponderEliminarMuchas gracias Mónica. Un feliz año para ti también :).
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