Cuando visito lugares como El Escorial, en Madrid, me doy cuenta de que en España nunca hemos sabido vendernos bien. Hay tantos lugares y monumentos grandiosos que apenas se conocen entre los que habitan fuera de nuestras fronteras.
El Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial fue el centro político del imperio de Felipe II (siglo XVI) y fue concebido como monasterio, basílica, seminario, panteón, palacio y biblioteca.
El rey era un gran amante de la naturaleza y los jardines por lo que, junto al monumental edificio de granito, hizo construir un jardín que en su día estuvo cubierto con gran variedad de flores de colores.
Felipe II era dueño del mayor reino jamás conocido ("el imperio donde nunca se ponía el sol"), veinte veces mayor que el Imperio romano. Colocó la primera piedra del monasterio en 1563 (conmemoraba así su triunfo sobre el ejército francés en la batalla de San Quintín el día de San Lorenzo, 10 de agosto de 1557).
El proyecto corrió a cargo del arquitecto Juan Bautista de Toledo y tras su muerte fue terminada por Juan de Herrera, en 1584. Éste último dio nombre al estilo herreriano que caracteriza el edificio (arquitectura sobria, sin ornamentación superflua, fiel a los cánones clásicos renacentistas).
Municipio de San Lorenzo de El Escorial, en las faldas del monte Abantos, en la sierra de Madrid (Guadarrama)
Se dice que Felipe II observaba la construcción del monasterio desde una silla labrada en la piedra granítica. Además el monasterio se erigió utilizando madera de pino procedente del Alto Tajo y del Guadiela, transportada por el río (en la entrada sobre el Canal de Chincha se ve el río Guadiela, por dónde los gancheros hacían pasar la madera). Estas son las vistas desde la Silla de Felipe II:
Vistas de Madrid desde el paraje de la Silla de Felipe II
Según wikipedia, "fue considerado, desde finales del siglo XVI, la Octava Maravilla del Mundo, tanto por su tamaño y complejidad funcional como por su enorme valor simbólico. Su arquitectura marcó el paso del plateresco renacentista al clasicismo desornamentado. Obra ingente, de gran monumentalidad, es también un receptáculo de las demás artes.
Sus pinturas, esculturas, pergaminos, ornamentos litúrgicos, etc. hacen que El Escorial sea también un museo. Su compleja iconografía e iconología ha merecido las más variadas interpretaciones de historiadores, admiradores y críticos. El Escorial es la cristalización de las ideas y de la voluntad de su creador, el rey Felipe II, un príncipe renacentista".
Pero vayamos a ver los jardines...
Camelias en flor contrastan con el sobrio granito de la construcción
El aspecto actual del jardín data del siglo XVIII y es de inspiración neoclásica. No soy especialmente fan de este tipo de jardines, pero el contraste sobrio del verde de los setos de boj con el granito del edificio por un lado y las vistas de la montaña por el otro, me ha resultado un disfrute para los sentidos.
Un lugar apto para descansar y recrearse (sospecho que en verano no tanto, ya que el sol pegará bien).
Sin embargo, estos jardines sobrios, carentes de movimiento, rígidos, estaban ocupados por gran variedad de plantas de flor en la época de Felipe II. Muchas de estas plantas habían sido traídas del Nuevo Mundo (América).
"Sembrados por la verdura tan variados colores de flores blancas, azules, coloradas, amarillas, encarnadas y de otras agradables mezclas, y están tan bien compartidas , que parecen alfombras finas traídas de Turquía , del Cairo o Damasco" ( escrito por fray José de Sigüenza, prior del monasterio, en su obra "Fundación del Monasterio de El Escorial").
El rey recopiló planos de jardines de Francia, Italia, Inglaterra y los Países Bajos, contratando a los mejores jardineros, tanto extranjeros como españoles:
En la siguiente imagen, al sudoeste del jardín, vemos la Galería de Convalecientes. Es un espacio amplio, aireado y lleno de luz diseñado para el reposo de los enfermos.
Y justo detrás está el estanque, que proporcionaba pescado a los monjes y agua a la huerta, que se encuentra en el nivel inferior.
Huerta en el nivel inferior
Sin mucho más que decir, os dejo con unas cuantas imágenes y os invito a visitar este impresionante enclave, lleno de historia y de arte:
Vistas con la montaña detrás:
Bibliografía:
Bojstad, A. "Jardines mágicos de España". Ediciones BLUME.
Wow Lisa, another spectacular place! We are getting to know Spain better because of you and other blogs! It's true that there are so many great places like this that are still little known to your usual tourist. Most of the focus are on the beaches but there's more to Spain than that.
ResponderEliminarYes!! That's true!! Beaches are very nice, but there are Manu other things and places that are worth visiting :)
EliminarSi que es una verdadera maravilla. Hace muchos años que lo visité y quedé impresionado. Tengo pensado visitarlo de nuevo este verano con Esther, que después de ver en palacio de Aranjuez y de Madrid me propuso visitar el resto de los palacios reales. Todo a su tiempo.
ResponderEliminarLa entrada es estupenda y leyéndola he recordado aquella visita. Gracias por compartirlo.
¡¡Muchas gracias Mario!! El palacio de Aranjuez es espectacular...la verdad es que hay sitios tan bonitos y tan llenos de historia. Me alegro de que te haya gustado :)
EliminarEs precioso Lisa, lo conozco y me gusta mucho. Besitos.
ResponderEliminar¡¡Sí Teresa!! ¡¡Un beso!! Gracias.
ResponderEliminarPues tienes razón, en los jardincitos en verano pega el Lorenzo que da gusto. Por cierto, que no muy lejos de allí queda el arboreto Luis Ceballos... ;)
ResponderEliminar¡Sí! ¡¡El Arboreto Luis Ceballos!! Todo ingeniero de montes está obligado a conocerlo :D
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