Ahora que entramos en el deseado fin de semana, os invito a dar un paseo por la estufa de Graells o de Las Palmas, el invernadero más antiguo (s. XIX) del Jardín Botánico de Madrid.
Es curioso que aunque había estado en el otro invernadero (llamado Santiago Catroviejo Bolibar) varias veces, nunca me había dado cuenta de que existía este ¿Entramos?
Este lugar tiene un encanto especial. Un techo acristalado recorrido por trepadoras y una pared totalmente cubierta de Monstera deliciosa (costilla de Adán). Además hay varias plataneras y numerosos ejemplares de helechos arborescentes:
Musa vetulina
Y ese techo...
Hay una gran Brugmansia arborea (trompetero o floripondio) que llega hasta el techo, así que las flores sólo se pueden ver de lejos, pero hacen un efecto bonito al resaltar frente al tejado acristalado:
Más exuberancia:
Ha sido un paseo corto pero lleno de exotismo y de cierto sabor a antaño...ha llegado el momento de salir.
¡Qué bonito paseo! Me encanta ese aire antiguo de estos invernaderos... y qué me cuentas de la pared con costilla de adán! Precioso, precioso...
ResponderEliminar¡¡A mi me encantó cuando fui!! como bien dices, el aire antiguo de los invernaderos es tan bonito... me pediría uno así para mi casa jeeje.
Eliminar¡¡Gracias José Manuel!!
Precioso Lisa, ¡ cuanto me gusta. Besos.
ResponderEliminar¡Gracias Teresa :D!
EliminarA taste of the tropics in Madrid!
ResponderEliminarHehe, indeed!!
EliminarYou go to the most wonderful places. What a spectacular roof!
ResponderEliminarI love the roof too!! maybe you could do something similar but small in your glass room...
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