Ikebana en el Jardín Botánico de Madrid

Junto con la exposición de orquídeas (orquimadrid) que hubo en el Jardín Botánico el pasado 18 y 19 de mayo, había una exposición de Ikebana.

Anthurium y hojas de Phormium sumergidas en agua.

El ikebana es el arte del arreglo floral japonés. En todas las culturas se han apreciado las flores y se han hecho arreglos florales de una u otra forma, pero la japonesa presenta su sello personal, de exquisita delicadeza y con una visión diferente.

Anthurium y Monstera.

Es por eso que cuando uno ve estos arreglos es imposible que no le llamen la atención.

Este arreglo fue uno de mis favoritos. Muy sencillo y con mucha fuerza:

Tulipanes y hojas de alpidistra.

La palabra "ikebana" viene a significar "traer vida a las flores". Tras ser cortadas de la planta y separadas del suelo (lo que implica su muerte) se les da nueva vida cuando se arreglan en un recipiente adecuado. Originalmente las formas del ikebana estaban compuestas por tres líneas principales para simbolizar la armonía entre el cielo, el hombre y la tierra. Se creaba una representación en miniatura del universo en un pequeño jarrón o recipiente, con tres líneas de diferentes alturas (alta, media y baja) que ayudaban a estructurar una forma tridimensional.

Phormium, Limonium y Phalaenopsis.

El ikebana requiere una observación cuidadosa de la naturaleza y de las formas, colores y texturas de los materiales. Suele emplear pocos materiales ya que esto tiene mayor significado que utilizar gran cantidad.

Astilbe, cala y Monstera.

El propósito del ikebana es proporcionar placer al autor mediante el proceso de creación, aparte de hacer disfrutar al observador. Se realiza para un lugar, una habitación en concreto.

Phormium, Paeonia y Phalaenopsis.

La práctica más antigua asociada con el ikebana se centraba en el ofrecimiento de flores a Buda en el templo. Este tipo de arreglo floral llegó a Japón junto con la introducción del budismo en el país en el siglo VI. Pero fue alrededor del siglo XV cuando esta práctica comenzó a desarrollarse como una forma de arte.

La casa japonesa tradicional cuenta con el "tokonoma", área que se utiliza para mostrar objetos de arte y un objeto central del diseño interior. La habitación con el tokonoma era considerada la más importante de la casa y se utilizaba para recibir a invitados distinguidos y ocasiones especiales. Cuando el ikebana comenzó a mostrarse en el tokonoma de las casas de la aristocracia cambió su función desde una religiosa a una ornamental (decoración de la casa).

En el siglo XVI se introdujo un estilo denominado "rikka". Dicho estilo utilizaba materiales que se disponían de forma asimétrica en un jarrón de bronce alto. Otro estilo importante de ikebana surgido en la misma época es el "chabana", fuertemente influenciado por la ceremonia del te. Utiliza recipientes altos de apertura estrecha.

Otro estilo es "nageire", que aún es practicado como uno de los principales estilos en la actualidad. En el siglo XIX se creó el estilo "moribana", fuertemente influenciado por la cultura de occidente. Este estilo implica utilizar recipientes poco profundos llenos de agua en los que los materiales vegetales se sujetan gracias a un "kenzan" (base metálica de bastante peso y con púas que sirven de sujeción al material). La superficie del agua pasa a ser uno de los elementos del diseño al quedar expuesta a la vista, como se puede observar en el siguiente arreglo, compuesto de astilbe, peonías y ramas de alguna proteácea:

Moribana sigue siendo uno de los estilos principales hoy en día.

En la actualidad existen varios estilos y métodos de ikebana que se enseñan en diferentes escuelas de Japón. También se puede aprender a hacer ikebana en muchos otros lugares del mundo, como por ejemplo Madrid, y muestra de ello son todos estos arreglos que se expusieron en el Jardín Botánico. Os dejo con unas cuantas fotos más para que os hagáis una idea de lo que se pudo ver. ¡Un saludo!